¿Estás adelgazando y llevas una o varias semanas que no pierdes peso? En Mediterránea hemos detectado que en cualquier etapa de adelgazamiento se produce un estancamiento. Por ello, esta semana te proponemos 5 soluciones para arrancar de nuevo hacia tu objetivo. Si te sientes identificada con alguna de estas prácticas, aplica la solución propuesta. ¡Ánimo!
1 – ¿Te saltas el desayuno? ¿Otra vez llegas tarde a trabajar y sólo tomas un café rápido antes de salir de casa? Saltarse el desayuno es una mala noticia para tu adelgazamiento: te sentirás hambrienta dentro de un rato, en el trabajo o por la calle, justo cuando te será más fácil comprar una pieza de bollería o un pintxo, que optar por opciones más sanas.
La solución: llévate en la mano algún alimento que puedas comer por el camino, como fruta, yogur para beber, otras bebidas lácteas o barritas de cereales. Y no olvides tu tentempié saludable para media mañana.
2 -¿Eliges bien tus platos favoritos? Si tu familia tiene un plato favorito, es difícil eliminarlo de tus menús. Lo malo es que esos platos suelen tener un alto contenido en grasas y calorías.
La solución: ya sabes que en el método Mediterránea nada está prohibido, y mucho menos tus comidas favoritas. Sigue disfrutándolas pero sírvete una porción más pequeña, acompañada por una cantidad más generosa de verduras o ensalada. Otra buena idea es preparar una versión más baja en calorías de esos placeres gastronómicos. Opta por alimentos más bajos en grasa, aumentar el consumo de pescado te dará resultados espectaculares. Dentro de las carnes el pollo, pavo y conejo son las mas pobres en calorías.
3 – Excesos sociales: cuando sólo íbamos al restaurante dos o tres veces al año, ¡había que aprovechar! Era normal pedir todo lo que nos apeteciese. Ahora todo es diferente y comemos fuera más a menudo. Por ello, debemos ser conscientes de nuestras elecciones.
La solución: buscar en la carta los platos elaborados con métodos de cocción saludables, como alimentos a la brasa, hervidos, en papillote, wok,etc. Pide que te sirvan la guarnición y los aderezos aparte. Te será más fácil llevar el control.
4 -¿Cuentas o descuentas? que si unas patatas fritas mientras revisas el correo electrónico, que si unas galletitas mientras ayudas a los niños con los deberes… Si vamos picando mientras hacemos otra cosa, nuestra atención se desvía de los alimentos, comemos de forma inconsciente y más cantidad, y solemos pensar que esas calorías “no cuentan”, pero vaya si cuentan…
La solución: establece unas reglas básicas para ir cumpliendo día a día, momento a momento. Por ejemplo, “hoy no voy a comer mientras veo la televisión”. Y siempre, anota todo lo que comas y bebas durante el día en una lista de control. Saber que debes apuntarlo todo hará que te lo pienses dos veces antes de hacer según qué elecciones.
5 – Desmotivación: ¿Te aburres de comer siempre lo mismo? Algunos métodos de adelgazamiento se ciñen al uso limitado de una serie de alimentos y platos que hacen el proceso de perder peso más difícil.
La solución: La variedad es una de las claves del éxito más importantes. Una alimentación diversa y bien surtida te aportará la MOTIVACIÓN que necesitas para seguir el método y para evitar el riesgo de aburrirte y abandonar. Por ello, en Mediterránea proponemos diferentes recetas para cada día. Por ejemplo, en el caso de las ensaladas, variedad es entender que no todas las ensaladas deben hacerse con lechuga, ni el mundo de los aderezos se acaba en el aceite y el vinagre. ¡El yogur también existe!
Alba González, Nutricionista. Gimnasio Urtzi.
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